El propósito de utilizar filtros para fotografía en color es lograr efectos de color.
En la fotografía de reproducción de color, el uso de filtros ayuda a eliminar o reducir la desviación de color de la fuente de luz, logrando así el propósito de restaurar correctamente los colores. La temperatura de color de diferentes fuentes de luz es diferente. Por ejemplo, el color de la luz de las lámparas incandescentes es amarillo y el color de la luz de las lámparas fluorescentes es azul. Sin embargo, la fotografía de reproducción en color necesita restaurar con precisión el color real del sujeto, por lo que es necesario utilizar filtros para ajustar el color de la fuente de luz para acercarlo a la temperatura de color de la luz natural. Los filtros pueden absorber o transmitir selectivamente colores de luz específicos, cambiando así las propiedades del color de la luz. Mediante el uso de filtros adecuados, la aberración cromática de la fuente de luz se puede corregir eficazmente, haciendo que las fotografías en color tomadas sean más realistas y precisas.