¿Cómo es vivir en prisión?
¿Sabes cómo es la vida carcelaria? ?La vida en prisión es relativamente regular. Hay que seguir las disposiciones del personal penitenciario, levantarse a tiempo y trabajar según un horario unificado. Después de llegar a la prisión desde el centro de detención, los reclusos primero se dirigen al área de educación para estudiar y reformarse. La prisión entregará uniformes, vajillas y artículos de tocador a los reclusos, y también se encargará de que se sometan a exámenes físicos. Mucha gente puede sentir curiosidad, ¿es la vida muy cómoda? Pero tal vez no sea lo que piensas. La prisión es como una gran fábrica cerrada, y cada recluso es un trabajador en su interior. Cada "fábrica" es diferente de lo que vemos en la vida. Aquí a cada preso no se le permite abandonar su puesto sin autorización, y cada uno tiene su propia zona fija y su horario de trabajo cada día. También hay diferencias. Los viernes son para trabajar, mientras que los sábados y domingos son para estudiar y descansar. Y están estudiando lentamente en prisión, para poder tener un trabajo que puedan hacer después de salir. ?Los reclusos deberán seguir las disposiciones de los directivos de la prisión. Se evaluará su trabajo diario. Sus puntuaciones en la evaluación podrán reducir sus penas y permitirles salir y recuperar su libertad lo antes posible. Por lo tanto, todos en la prisión trabajan muy duro porque todos quieren recuperar su libertad. Desde este punto de vista, la prisión es como una fábrica de aprendizaje de oficios, donde la gente trabaja, aprende y se transforma. También existen medidas básicas bastante completas en las prisiones: los reclusos pueden vivir una vida normal y recibir un salario sin preocuparse por la comida y la ropa. Sin embargo, las largas horas de trabajo requeridas y el ambiente laboral de alta presión todavía causan estrés psicológico. A partir de este punto, podemos ver que no es difícil para los presos comparar el interior de la prisión con el exterior, por eso muchas personas se arrepienten de lo que hicieron afuera después de entrar.