La historia de la investigación sobre el síndrome del sabio adquirido
En 1996, el Dr. Bruce Miller informó en la revista médica "The Lancet" que tres personas se convirtieron en pintores destacados después de sufrir un caso de demencia frontotemporal (DFT)[3]. El paciente no tenía ningún interés especial ni logros en el arte antes de la enfermedad, pero a medida que avanzaba la demencia, de repente desarrolló un talento asombroso para la pintura.
Una obra de arte de un paciente con demencia 8 años después de su enfermedad. Antes de su enfermedad, nunca había tocado un pincel. Fuente de la imagen: Referencia [3]
El mismo paciente que nunca se ha formado en pintura tiene 64 años. Empecé a practicar la pintura después de enfermarme. En el cuarto año de mi enfermedad, comencé a restaurar imágenes con detalles perfectos. Después de otros dos años, comencé a utilizar muchos marrones y amarillos en mis creaciones. El paciente dejó de pintar dos años después de la creación de este cuadro.
En octubre de 1998, el Dr. Miller describió en la revista Neurology que otros dos pacientes con la misma demencia del lóbulo frontotemporal también tenían excelentes habilidades para dibujar.
Para el año 2000, el Dr. Miller había ampliado su número de casos de demencia frontotemporal/talento artístico adquirido a 12 casos, que ahora también incluye talento musical despertado del sueño. Además, después de comparar las imágenes funcionales SPECT, los investigadores también encontraron que este síndrome de savant adquirido y el síndrome de savant autista congénito son similares en términos de daño funcional cerebral: ambos tienen daño funcional similar en el lóbulo temporal izquierdo del cerebro y mejora de la función cerebral. de la neocorteza posterior.
En 2005, "Neurología" informó de un caso de "genio accidental" provocado por una hemorragia cerebral repentina: antes de la aparición de la enfermedad, el paciente no tenía interés por la creación artística y no mostraba ningún talento. Pero a las pocas semanas de la repentina hemorragia subaracnoidea del paciente, comenzó a “llenar muchos cuadernos de poesía, crear pinturas exageradas y expresivas y pasar casi todo su tiempo pintando y esculpiendo”. No sólo está lleno de energía creativa, sino que también. Tampoco puedo dejar de crear. Su deseo de llenar todo el espacio con sus obras se ha convertido en un trastorno compulsivo. Pintó todos los pisos, azulejos y techos de su casa. Pintó frenéticamente en todos los lugares que pudo, no solo con pinceles y pinturas, sino incluso con cera y fuegos artificiales. Esta locura finalmente hizo que su esposa lo dejara. Numerosos documentales han cubierto la historia de Tommy McHugh, un hombre con síndrome de savant adquirido. Entre ellos, "My Genius Brain" proporciona una descripción vívida y detallada de la vida de este paciente [5].
Con base en informes anteriores, un grupo de cinco pacientes ancianos adquirieron la capacidad de pintar después del inicio de la demencia frontotemporal; sus pinturas eran reproducciones precisas, pero carecían de abstracción o valor simbólico; su memoria episódica se conservaba; la memoria fue destruida; y mostraron un enfoque extremadamente alto y obsesivo en el proceso de pintura. La tomografía computarizada por emisión de fotón único (SPECT) mostró un daño funcional significativo en el lado izquierdo de sus cerebros.