La línea divisoria entre la Antártida y América del Sur
El estrecho lleva el nombre de Francis Drake, un capitán corsario británico del siglo XVI. Dirigió su flota a través del estrecho en 1578, convirtiéndose en el primer europeo en cruzar el estrecho. El estrecho de Drake es uno de los estrechos más anchos del mundo. Tiene unos 900 kilómetros de ancho en su punto más estrecho y 970 kilómetros en su punto más ancho. Su profundidad media del agua es de unos 3.400 metros y su punto más profundo es de 5.248 metros.
Debido a que el Estrecho de Drake conecta los océanos Pacífico y Atlántico, tiene un impacto importante en la circulación oceánica y el clima global. Al mismo tiempo, este estrecho es también un paso importante para la migración de la vida marina. La vida marina antártica ingresa a las aguas cercanas a Sudamérica a través de este estrecho en busca de alimento, y al mismo tiempo trae agua fría antártica, lo que hace que el ecosistema marino del sur de Sudamérica sea muy singular.
Por lo tanto, el Pasaje de Drake, como línea divisoria entre la Antártida y América del Sur, no sólo tiene importancia geográfica, sino que también tiene un impacto importante en los sistemas climáticos y oceánicos globales.