¿Qué advertencia nos trae el violento asesinato de médicos en Beijing?
Es muy triste este incidente médico. Un excelente médico nos dejó así. El asesinato violento de médicos en Beijing no es el primer incidente médico y, naturalmente, no será el último. La relación entre médicos y pacientes en nuestro país sigue siendo muy tensa, lo que supone una dura prueba para el desarrollo de la atención médica. No todo el mundo quiere que se repita un incidente así, pero ante momentos así, siempre nos sentimos impotentes. Cada uno de nosotros, sin importar quiénes seamos, debemos reflexionar sobre nosotros mismos en este incidente.
En primer lugar, el país debería mejorar las leyes pertinentes y los hospitales también deberían emitir regulaciones pertinentes. Incidentes médicos como éste ya no son sólo incidentes médicos, sino delitos penales. Los delincuentes deben ser sancionados y castigados de conformidad con la ley. Es deber ineludible de los médicos salvar a las personas, por lo que el país tiene la responsabilidad y la obligación de brindarles un fuerte respaldo. Cuando ni la naturaleza humana ni la moralidad pueden impedir que algunas personas cometan actos criminales, la ley debe defenderse e impartir justicia. Los médicos tienen la responsabilidad y la obligación de salvar la vida de los pacientes, siempre que la seguridad personal del médico esté legalmente protegida.
En segundo lugar, como médico, debes prestar atención a la autoprotección. No podemos negar que siempre habrá médicos irresponsables y familiares de pacientes ingratos en este mundo. Como médico, siempre debe prestar atención a proteger su seguridad personal después de hacer cosas dentro del alcance de sus funciones. En un lugar especial como el hospital, hay todo tipo de pacientes. La ética profesional de los médicos les exige tratar a los pacientes sin distinción. Sin embargo, durante este proceso, los médicos siempre deben prestar atención a la seguridad de sus propias vidas.
Finalmente, como familiares de pacientes, debemos protegernos de la arrogancia y la impetuosidad, ser más racionales y afrontar la muerte correctamente. No todo el mundo quiere que sus seres queridos sufran, pero los médicos no son dioses y no pueden salvar a todos en el mundo. Los que yacen en la cama del hospital son tus familiares, por eso estás ansioso y enojado, pero los médicos que están frente a la cama del hospital son inocentes. También son padres e hijos de otras personas. La responsabilidad del médico es hacer todo lo posible para salvar al paciente. Como miembro de la familia, debemos aprender a ser agradecidos en lugar de devolver la bondad con el mal.