Detalles del caso Khashoggi
Obviamente, no todos están dispuestos a negociar la paz entre Yemen y los hutíes. Al igual que Palestina e Israel, alguna vez quisieron formar un país, pero debido a la oposición interna y la interferencia de fuerzas extranjeras, no lo han logrado. ¿Cómo pudo Yemen, que no está gobernado por una gran potencia, alcanzar una reconciliación tan rápidamente? Aunque Estados Unidos va bien, siempre ha aparecido en el escenario internacional como un "agitador de mierda". De poco han servido aquellos que realmente han tenido negociaciones significativas.
Cuando el asesinato del periodista saudí Jamal Khashoggi hizo que Arabia Saudita enfrentara una tremenda presión internacional, también abrió inesperadamente una nueva oportunidad para las conversaciones de paz yemeníes que habían fracasado varias veces. Después de que el secretario de Defensa estadounidense Mattis y el secretario de Estado Pompeo pidieran a todas las partes en la guerra que alcanzaran un acuerdo de alto el fuego "dentro de los próximos 30 días", el gobierno yemení, apoyado por la coalición liderada por Arabia Saudita, anunció su voluntad de reiniciar las conversaciones de paz con Las fuerzas armadas hutíes, respaldadas por Irán, continúan con el fin de tres años y medio de guerra.
De hecho, las fuerzas del gobierno yemení han estado reuniendo tropas cerca de Hodeidah, aunque oficialmente acusan a las fuerzas armadas hutíes de enviar tropas aquí en secreto, quién sabe la situación real. En determinadas conversaciones de paz, la delegación armada hutí nunca se presentó, acusando a la coalición saudí de obstruir sus viajes. Esto demuestra que Arabia Saudita no quiere conversaciones de paz entre las dos fuerzas, e Irán, detrás de las fuerzas armadas hutíes, tampoco quiere esto. Así que promovieron conversaciones de paz en la superficie, pero las sabotearon en secreto.
Debido a las víctimas civiles y la crisis humanitaria, las acciones de todas las partes en la guerra y el papel de Estados Unidos han planteado muchas preguntas. Según funcionarios estadounidenses informados, después del caso Khashoggi, Estados Unidos intentó utilizar la presión internacional que enfrenta Arabia Saudita para obligarla a poner fin a la guerra en Yemen lo antes posible. Esto no es más que intentar ganar una buena impresión en la comunidad internacional. Después de todo, alardear no genera impuestos.