Supongamos que su banco no tiene reservas excedentes. En este momento, un cliente con buen crédito acude al banco a solicitar un préstamo. ¿Debería negarme?
En general, los bancos tienen exceso de reservas. Teniendo en cuenta lo anterior, es posible. Si este no es siempre el caso, puedes acudir a otros bancos para obtener préstamos cuando el exceso de reservas sea insuficiente. Esto depende de la operación del banco, por lo que si el banco lo rechazó en ese momento, puedes volver a solicitarlo más tarde. O sin ampliar el saldo del préstamo, si alguien paga el préstamo, puede completarlo dentro del saldo fijo. Al mismo tiempo, un exceso de reservas insuficiente no es razón suficiente. Si no fuera un banco privado, generalmente no existiría tal motivo. Generalmente significa que no hay límite de préstamo, lo da el banco superior y el poder final recae en la casa matriz. Si planea satisfacer las necesidades de este cliente, puede solicitar al banco superior explicarle que el proyecto puesto en producción o desarrollado por este cliente tendrá la ventaja de estar libre de riesgos y tener altos rendimientos en el futuro.
El ratio de reservas de depósitos es una importante herramienta de política monetaria del banco central. Por ley, los bancos comerciales deben depositar un determinado porcentaje de sus depósitos en el banco central. Al ajustar los requisitos de reserva de los bancos comerciales, el banco central puede controlar la base monetaria y, por tanto, regular la oferta monetaria. En pocas palabras, es una parte de las reservas reservadas por los bancos comerciales o las instituciones de depósito, además de las reservas legales, que las autoridades monetarias deben pagar. Los bancos comerciales retienen reservas excedentes principalmente para hacer frente a grandes retiros de efectivo inesperados, depósitos de liquidación o mejores oportunidades de inversión. Los cambios en el exceso de reservas afectan el tamaño del multiplicador monetario. Cuando la oferta monetaria base permanece sin cambios, restringe la capacidad del sistema bancario para crear dinero.