Un nuevo concepto de clima espacial
La definición física tradicional de "clima" es: el estado atmosférico mostrado de manera integral por elementos meteorológicos como el viento, las nubes, las precipitaciones, la temperatura y la presión del aire en un instante o dentro de un período de tiempo relativamente corto. El clima en términos diarios se refiere a las imágenes físicas atmosféricas neutras y los estados físicos que ocurren en la troposfera y afectan la vida y la producción humana, como nublado, soleado, lluvia, nieve, frío, cálido, seco, húmedo, etc.
La meteorología espacial es un concepto de cambios en el entorno espacial cercano a la Tierra. Es distinto del tiempo dentro de la atmósfera de un planeta e involucra fenómenos como plasma espacial, campos magnéticos y radiación. El clima espacial suele estar estrechamente asociado con la magnetosfera espacial cercana a la Tierra, pero también estudia los cambios en el espacio interplanetario. En nuestro sistema solar, el clima espacial se ve afectado principalmente por la velocidad del viento y la densidad del viento solar, y el campo magnético interplanetario generado por el plasma solar. Una variedad de fenómenos físicos están asociados con el clima espacial, incluidas tormentas y subtormentas geomagnéticas, corrientes en los cinturones de radiación de Van Allen, perturbaciones y centelleos ionosféricos, auroras y corrientes inducidas por cambios del campo magnético en la superficie de la Tierra.
Las eyecciones de masa coronal y las ondas de choque relacionadas también son importantes impulsores del clima espacial porque pueden comprimir la magnetosfera y desencadenar tormentas geomagnéticas. Las partículas de alta energía provenientes del sol, eyecciones de masa coronal o aceleradas por erupciones solares, también son importantes impulsores del clima espacial, ya que pueden dañar la electrónica de las naves espaciales y amenazar la vida de los astronautas. El clima espacial tiene un profundo impacto en estos campos de exploración y desarrollo espacial. Los cambios en el campo geomagnético pueden provocar cambios en la densidad atmosférica, lo que hace que la altitud de las naves espaciales en órbita terrestre baja disminuya rápidamente. Las tormentas geomagnéticas causadas por la actividad solar pueden cegar los sensores de las naves espaciales e interferir con los dispositivos electrónicos a bordo. Comprender el entorno espacial es fundamental para el diseño de sistemas de protección para naves espaciales construidas por el hombre. Las tormentas magnéticas también aumentarán la cantidad de radiación para los asistentes de vuelo cuando vuelen a gran altura.
El clima espacial se refiere a los cambios en el estado del entorno espacial en el espacio cercano a la Tierra o desde la atmósfera solar a la atmósfera terrestre. A diferencia del concepto de clima en la atmósfera planetaria de la Tierra (troposfera y estratosfera), el clima espacial describe cambios en el plasma de fondo, el campo magnético, la radiación, etc. en el espacio. La mayoría de los fenómenos meteorológicos espaciales son impulsados por la energía transportada por el viento solar procedente de la superficie cercana al Sol y de la atmósfera solar (cromósfera y heliosfera). El clima espacial a veces también se refiere a cambios en las condiciones ambientales en el espacio interplanetario (y rara vez en el espacio interestelar).
La meteorología espacial tiene dos enfoques: la investigación científica y su aplicación. El término clima espacial no se empezó a utilizar hasta la década de 1990, y antes de esa época, la actividad del clima espacial en el sentido actual se consideraba parte de la física o de la física de la atmósfera superior y de la exploración espacial.