La epidemia aún no ha terminado. Hay muy pocos turistas en París. ¿Cómo debería la población local prevenirlo de manera proactiva?
Los gobiernos locales deben instar a los residentes a reducir las reuniones y otras actividades concurridas, supervisar a la población local para que usen máscaras correctamente y cerrar atracciones como el Louvre, Disneyland París y galerías de arte para evitar aglomeraciones. Se anima a la población local a mantener una cierta distancia social, evitar comportamientos de contacto como dar la mano, besar y abrazar, y desinfectar y abrir ventanas periódicamente en lugares públicos. Promover el conocimiento científico sobre la prevención de epidemias, aislar a las personas en sus hogares de manera oportuna y controlar estrictamente los centros de transporte, como aeropuertos y estaciones, para evitar casos importados. El gobierno debería brindar ayuda a las empresas en problemas y reducir sus costos operativos, como impuestos, alquiler y facturas de agua y electricidad. La epidemia mundial continúa propagándose y no se puede ignorar la prevención y el control de la epidemia. En una situación global como esta, que enfrenta los mismos desafíos, las personas de todo el mundo deben unirse y hacer todo lo posible para evitar que la epidemia traiga mayores pérdidas a vidas humanas y propiedades. No se debe permitir ninguna forma de unilateralismo y no se debe permitir que se propaguen opiniones públicas como rumores, prejuicios, egoísmo, pánico y ansiedad que no favorecen la prevención y el control de la epidemia.