¿Cuáles son las ventajas de un portaaviones que despega de una catapulta sobre un portaaviones que despega de una catapulta?
Uno: Baja dificultad técnica, bajo coste de fabricación y baja dificultad de mantenimiento. El despegue con salto de esquí no requiere la instalación de otros equipos, sólo es necesario mantener la pista despejada. La catapulta de vapor más sencilla cuesta más de 100.000 dólares estadounidenses, sin incluir el mantenimiento diario posterior, y muchos equipos periféricos de apoyo también cuestan dinero. En comparación, es barato y resistente.
La segunda es que ocupa menos espacio y consume menos recursos. Debe haber un área dedicada para el despegue de eyección como área crítica de despegue, que no puede usarse para otras operaciones. Para el portaaviones, esto supondrá una gran pérdida de recursos espaciales y reducirá la carga de bombas y combustible del propio portaaviones. Incluso si se utiliza para almacenar recursos de agua dulce para operaciones a larga distancia, esta parte del área desempeñará un papel importante. Además, la catapulta también consumirá una enorme energía del propio portaaviones.
Tres: Envío rápido, seguro y confiable. No mires el momento de la expulsión, date prisa. Sin embargo, el tiempo de preparación es largo y el salto de esquí sólo puede despegar cuando no hay nadie delante de la pista. Simplemente colgar el avión en la catapulta lleva mucho tiempo, lo que también es un defecto en la carrera contra el tiempo. Expulsar y despegar al mismo tiempo puede provocar fácilmente accidentes de seguridad. En comparación, el despegue en salto de esquí es mucho más fiable y la fiabilidad es especialmente importante en el campo de batalla.
Sin embargo, teniendo todo en cuenta, el despegue con catapulta será una tendencia en la fabricación de portaaviones en el mundo, y la tecnología de despegue con catapulta seguirá siendo elegida cuando las condiciones lo permitan.