¿Es necesario depreciar los activos biológicos?
Los activos biológicos no requieren depreciación.
1. Características de los activos biológicos
Los activos biológicos son significativamente diferentes de los activos fijos. En primer lugar, los activos biológicos tienen características de vida. Pueden crecer, reproducirse y morir. Sus cambios de valor se ven afectados por diversos factores, como el entorno natural, el ciclo de crecimiento y la demanda del mercado. En segundo lugar, el valor de los activos biológicos suele estar estrechamente relacionado con su rendimiento de producción y su precio de mercado, en lugar de verse afectado por el desgaste físico y la reducción de valor como los activos fijos. Por tanto, los métodos de gestión y contabilidad de los activos biológicos también son diferentes de los de los activos fijos.
2. Método contable de los activos biológicos
Debido a las características de los activos biológicos, el método contable generalmente adopta el método del costo o el método del valor razonable. El método del costo se refiere a la contabilidad basada en el costo de adquisición de los activos biológicos, incluido el precio de compra, los costos de transporte, los costos de alimentación, etc. La regla del valor razonable valora los activos biológicos según el valor de mercado para reflejar su valor real. Ambos métodos pueden reflejar mejor los cambios en el valor de los activos biológicos, pero la provisión para depreciación no es adecuada para contabilizar los activos biológicos.
3. Tratamiento contable de los activos biológicos
En términos de tratamiento contable, los activos biológicos suelen contabilizarse como inventarios o partidas de activos biológicos, más que como activos fijos. Los inventarios se refieren a productos terminados o mercancías que una empresa mantiene para su venta en sus actividades diarias, productos en proceso durante el proceso de producción, materiales e insumos consumidos en el proceso de producción o en la prestación de servicios laborales, etc. Los activos biológicos se refieren a animales o plantas vivos involucrados en actividades agrícolas. Los cambios de valor de estos activos se ven afectados por factores naturales y no son adecuados para contabilizar por depreciación.
En resumen:
Los activos biológicos no necesitan acumular depreciación debido a sus características de vida y patrones especiales de cambio de valor. Su contabilidad y gestión deben basarse en las características y condiciones reales de los activos biológicos, y deben calcularse utilizando el método del costo o el método del valor razonable para reflejar mejor los cambios de valor de los activos biológicos.
Base jurídica:
"Normas de contabilidad para empresas comerciales"
El artículo 3 estipula:
Las empresas deben basarse en el principio de devengo Realizar el reconocimiento, medición y presentación de informes contables.
El artículo 25 estipula:
Los activos biológicos se refieren a animales y plantas vivos. Los activos biológicos se dividen en activos biológicos consumibles, activos biológicos productivos y activos biológicos de bienestar público. Los activos biológicos consumibles se refieren a activos biológicos mantenidos para la venta o cosechados como productos agrícolas en el futuro, incluidos cultivos extensivos, hortalizas, bosques maderables y ganado mantenidos para la venta. Los activos biológicos productivos se refieren a los activos biológicos mantenidos con el fin de producir productos agrícolas, proporcionar servicios laborales o arrendarlos, incluidos los bosques económicos, los bosques para leña, el ganado y los animales de tiro, etc. Los activos biológicos de bienestar público se refieren a activos biológicos cuyo objetivo principal es la protección y la protección del medio ambiente, incluidos los bosques cortavientos y fijadores de arena, los bosques de conservación del suelo y el agua y los bosques de conservación de las fuentes de agua.
Esta normativa aclara la definición y clasificación de activos biológicos y proporciona una base legal para la contabilización de activos biológicos. Según esta normativa, los activos biológicos no entran en la categoría de activos fijos y, por tanto, no requieren depreciación.