Características arquitectónicas del hotel Burgar Arab
A finales del invierno de 1999, el Bank of China International Hotel abrió sus puertas para recibir a los huéspedes. El nivel de lujo es tan impresionante que los expertos se avergüenzan. Realmente no sé cuántas estrellas debería darle: ¿cinco, seis o siete? Realmente no existe ningún precedente y no se pueden dar resultados definitivos. Algunas personas dicen que la porcelana debería estar marcada con siete estrellas. De hecho, algunas celebridades no son importantes, la clave es que la industria hotelera mundial es "incomparable". Esta enorme estructura entre el desierto y el océano dio origen a la búsqueda humana de la excelencia y a los sueños al estilo de Hollywood.
El hotel fue diseñado por el diseñador británico Tom White y está ubicado en una isla artificial junto al mar, con forma de velero. Tiene forma de torre, con 56 pisos de pies a cabeza y una altura de 321 metros. Tiene 202 habitaciones dúplex, un lujoso restaurante en el medio con vista a toda la ciudad y el atrio con jardín más alto del mundo. Está frente al Jumeirah Beach Hotel. Hubo un tiempo en que era el mejor del mundo. Es una pena que siendo vecino cara a cara con Boci parezca mucho más pobre.
Solo cuando ingresas al Hotel Boci puedes darte cuenta del significado de la gloria. El vestíbulo, el atrio, las suites, los baños... todo es dorado, incluso los tiradores de las puertas, los grifos, los ceniceros, los percheros y hasta el papel de carta están bañados en oro. Aunque era solo una capa delgada, superó la imaginación de los invitados e hizo que muchos peces gordos se sintieran halagados y halagados. El fallecido diseñador de moda Versace era un hombre que había visto mundo. Quedó impresionado por el lujo de la porcelana. Después de una buena noche de sueño, sorprenderá a todos siendo extremadamente útil.
Estar obsesionado con el dinero es muchas veces una palabra que alude a la depravación espiritual. Todas las “casas de oro” de Boci son amadas pero no adictivas. Cada detalle está tratado con reserva y delicadeza de caballero, sin rastro de vulgaridad. Por ejemplo, cortinas, cojines, armarios, frigoríficos… grandes y pequeños, todo es vulgar y elegante, vulgar y elegante. Por supuesto, depende del método del diseñador, de cómo sacar las patas del nido dorado y mantenerse alejado del carácter vulgar y del mal gusto.