Las siguientes entidades se pueden utilizar como entidades contables.
En términos generales, cualquier organización económica con contabilidad independiente puede convertirse en una entidad contable. Por ejemplo, un taller de contabilidad económicamente independiente podría considerarse una entidad contable y un sistema contable establecido para describir el flujo de capital dentro de este espacio. Además, las organizaciones económicas que pueden convertirse en entidades contables incluyen: empresas, grupos de empresas (es decir, un consorcio de empresas compuesto por una empresa matriz y filiales) e instituciones públicas.