El Ministro de Asuntos Exteriores iraní, Zarif, realizó una visita sorpresa a Francia durante la cumbre del G7. ¿Cuál era su intención?
Esto es para sembrar discordia entre Estados Unidos y Francia, porque las sanciones a largo plazo de Estados Unidos a Irán han causado grandes dificultades económicas y militares a Irán. De esta manera hizo que Estados Unidos cuestionara a Francia. Debo decir que se trata de un método muy inteligente, pero los intereses entre Francia y Estados Unidos son mucho mayores que los intereses entre Francia e Irán. El presidente francés definitivamente se lo explicará al presidente estadounidense. Porque si no hay explicación, se desencadenarán sanciones económicas de Estados Unidos contra Francia.
La razón más fundamental de esto es que las sanciones de Estados Unidos a Irán han provocado un grave declive económico. El intento de Irán de arrastrar a Francia al agua de esta manera también pretende perturbar la alianza entre la OTAN. Porque Irán quiere convertirse en el país más influyente de Oriente Medio, pero Estados Unidos e Israel no aceptarán en absoluto que Irán lo haga. Porque esto amenaza seriamente los intereses de Estados Unidos e Israel. Por lo tanto, Estados Unidos impuso sanciones a Irán para que Irán fuera obediente.
Sin embargo, como potencia regional, Irán no escuchará las opiniones de Estados Unidos en absoluto. También se debe a que es un país religioso islámico y debe tener voz absoluta en el mundo islámico. Una vez que se rinda ante Estados Unidos, su liderazgo en el Islam se reducirá considerablemente. Esto es algo que Irán no está muy dispuesto a ver.
También está la relación entre intereses petroleros, porque Estados Unidos e Irán son dos exportadores de petróleo muy importantes, pero porque las exportaciones mundiales de petróleo se liquidan en dólares estadounidenses. Estados Unidos utiliza este método para obligar a Irán a someterse. Pero ahora se puede decir que Estados Unidos ha subestimado a Irán, porque Irán nunca se rendirá ante Estados Unidos. Aspira a convertirse en una gran potencia en Oriente Medio.