¿Cuál es el propósito de la contabilidad?
En la era de la contabilidad única, la contabilidad corporativa es principalmente autosuficiente para satisfacer sus propias necesidades. El objetivo contable durante este período es calcular los ingresos y gastos de manera de lograr una balanza de pagos en la que los ingresos superen los gastos. Desde el siglo XII al XV, con el surgimiento de relaciones económicas capitalistas a lo largo de la costa mediterránea, la contabilidad progresó gradualmente desde la etapa de contabilidad de partida única a la etapa de contabilidad de partida doble. Los objetivos específicos de la contabilidad durante este período se pueden resumir en: proporcionar a los operadores información sobre todas las propiedades y transacciones. Durante este período, la contabilidad sirvió a las actividades comerciales de los operadores y demostró la función de gestión de la contabilidad. Desde los años 60 hasta el siglo XIX después de la revolución industrial. Nació la sociedad anónima y se convirtió en la forma básica de organización empresarial de la empresa. En esta forma organizativa, la propiedad de los activos y los derechos de gestión se separan, y el objetivo contable cambia para proporcionar el estado financiero y los resultados operativos de la empresa a los propietarios para evaluar el desempeño de las responsabilidades fiduciarias de los operadores. Con el desarrollo del mercado de valores, los accionistas se están volviendo cada vez más dispersos y la relación entre encomienda y encomienda se complica aún más. En este punto, además de lograr los objetivos anteriores, la contabilidad. También debería proporcionar información diversa a posibles inversores, acreedores y otras partes interesadas.