¿Qué es un contrato inteligente?
Lo entenderás con un ejemplo sencillo:
Supongamos que A pide prestada una gran cantidad de dinero a B, aunque esté escrito en blanco y negro. Sin embargo, una vez vencido, la Parte A se negó a reembolsar el préstamo por diversos motivos. En este momento, si la Parte B quiere recuperar el préstamo, sólo puede demandar. Los contratos inteligentes pueden resolver este problema si ambas partes, A y B, incluyen el monto del préstamo, el tiempo de pago y otra información de la tarjeta bancaria en el contrato antes de solicitar el préstamo. En la fecha de pago acordada, el préstamo se transferirá automáticamente a la cuenta de B, incluso si A no quiere pagarlo.
Fuente: Qiankun Finance