¿Qué comportamientos irracionales has visto en tus padres?
Rechinar a los niños todo el día, pero sin saber que los niños necesitan más estímulo
La idea constante es centrarse en el aprendizaje y la educación. Los padres que no saben cómo comunicarse con sus hijos solo los regañarán y educarán todos los días.
De hecho, no es que regañar pueda resolver todos los problemas. Al contrario, es posible que los niños se hayan vuelto inmunes a las regañas, lo que les facilita desarrollar el hábito de procrastinar.
Como padre, debe comprender que su hijo necesita más estímulo y comprensión. Cuando se comunique con su hijo, trate de utilizar un lenguaje conciso y claro. Aprender a respetarlo y comprenderlo le facilitará las cosas. que su hijo lo acepte, lo cual es mejor que regañar. ¡Es útil!
2. Siempre comparar con los hijos de otras personas, pero sin saber que indirectamente daña la autoestima del niño.
Muchos padres tienen altas expectativas para sus hijos, esperando que sus hijos se conviertan en realidad. dragones y que sus hijas se convertirán en fénix. Es comprensible. Pero también debemos darles a los niños espacio para que se desarrollen libremente y no podemos compararnos constantemente con los hijos de otras personas.
A los padres siempre les gusta comparar a sus hijos e incluso mostrar sus puntos fuertes. De hecho, esto está muy mal y no es recomendable, porque no sólo obstaculiza el crecimiento de los niños, sino que también los frustra y disgusta más.
Si los niños son tímidos o introvertidos puede incluso perjudicar su autoestima. Por ello, lo que los padres necesitan es darles a sus hijos orientación positiva y estímulo para que puedan crecer sanamente.
3. Los padres siempre ordenan a sus hijos, pero no saben que lo que los niños necesitan es igualdad.
Algunos padres siempre educan a sus hijos con un tono experimentado y se someten activamente a ello. lo que creen que está bien. Si los niños hacen algo que creen que está mal, se les prohíbe explícitamente hacerlo o tocarlo.
Los niños tienen sus propios pensamientos e ideas y su crecimiento debe ser afrontado por ellos mismos. Como padres, debemos tratarlos más como amigos. Partiendo de la premisa de respetar plenamente a los niños, comunicarse activamente con ellos y escuchar sus pensamientos sobre determinadas cosas puede ser una buena forma de educación.