Los indicadores internos comúnmente utilizados para reflejar las capacidades de control interno de los bancos incluyen la calidad de los activos crediticios, la rentabilidad y la liquidez.
Los "tres principios" de los bancos comerciales: seguridad, liquidez y rentabilidad son los principios operativos de los bancos comerciales, y la seguridad es el primer principio operativo de los bancos comerciales. La liquidez no es sólo un medio necesario para lograr seguridad, sino también una palanca de equilibrio entre rentabilidad y seguridad. Mantener una liquidez adecuada es un medio estratégico para que los bancos comerciales operen; la seguridad es la base de la rentabilidad, lo que a su vez garantiza la seguridad y la liquidez.
Por lo tanto, los bancos comerciales prudentes siempre buscan maximizar las ganancias manteniendo la seguridad y la liquidez. La seguridad significa que los bancos comerciales deben hacer todo lo posible para evitar la influencia de diversos factores inciertos y garantizar el funcionamiento y el desarrollo de los bancos comerciales. La razón por la que los bancos comerciales deben adherirse al principio de seguridad es la particularidad de sus operaciones.
Razones:
(1) Los bancos comerciales tienen poco capital y no pueden soportar grandes pérdidas.
② La particularidad de las condiciones operativas de los bancos comerciales, especialmente su seguridad.
(3) Los bancos comerciales enfrentarán diversos riesgos durante sus operaciones. ?
La liquidez se refiere a la capacidad de los bancos comerciales para satisfacer las necesidades de retiro de efectivo y préstamos necesarios de los clientes en cualquier momento, incluida la liquidez de los activos y la liquidez de los pasivos. La liquidez de los activos se refiere a la capacidad de los activos para liquidarse rápidamente sin pérdidas. Se refiere tanto a los activos rápidos como a la capacidad de otros activos para convertirse en activos rápidos sin pérdidas cuando los activos rápidos son insuficientes.
Rentabilidad, todas las empresas comerciales tienen un objetivo común: la búsqueda de la rentabilidad. Los bancos comerciales recaudan fondos inactivos de empresas, instituciones e individuos absorbiendo depósitos y emitiendo bonos, y luego utilizan los fondos concentrados para compensar la escasez temporal de fondos de algunas empresas, instituciones e individuos.