Hay muchas historias sobre el origen del Festival de Primavera.
Cuenta la leyenda que en la antigüedad existía un monstruo feroz llamado "Nian". Era tan grande como un buey, con un cuerno en la cabeza y una boca grande. Camina como una mosca. Solía alimentarse de ganado, pero en invierno, cuando escaseaba el alimento, empezó a comerse a los humanos. Por eso, cada Nochevieja, la gente se esconde en las montañas para evitar los daños del nuevo año.
Una víspera de Año Nuevo, un anciano llegó al pueblo pidiendo limosna. Vio gente haciendo las maletas para escapar de las vacaciones de Año Nuevo. Le dijo a la gente que mientras pusieran papel rojo en sus puertas y encendieran petardos, ahuyentarían a Nian. La gente se mostrará escéptica, pero aun así decide intentarlo. En medio de la noche, Nian irrumpió en el pueblo y vio papel rojo en cada casa, velas brillantemente encendidas en la casa y el sonido de petardos provenientes del patio. Nian estaba tan asustado que tembló y salió corriendo avergonzado. Resulta que Nian le tiene más miedo al rojo, al fuego y a las explosiones.
Desde entonces, cada Nochevieja, todos los hogares colocan coplas rojas y encienden fuegos artificiales. Esta costumbre se extendió cada vez más y más tarde se convirtió en una gran fiesta tradicional en China.