Di algo desagradecido.
2. Siempre hay un dicho, no quiero deberle cariño a nadie fácilmente. No importa lo duro que trabaje o la presión que soporte, no importa. ¡Nunca rompo mi promesa! ¡En mis huesos!
3. No quiero deberle nada a nadie ni pedir ayuda. Pero ésta es un área que no entiendo. Quiero hacer las cosas bien, pero quiero aprender pero no sé por dónde empezar y me da pereza. Realmente soy una basura.
4. Tener un mal hábito. No me gusta aprovecharme de los demás. Compro lo que puedo comprar, hago lo que puedo y no quiero deberle un favor a nadie.
5. Cuando necesitaba dinero urgentemente, descubrí que no había nadie a mi alrededor que pudiera pedir dinero. Soy muy sensible y no quiero deberle nada a nadie, así que tengo que tomarlo con calma.
6. Cuanto mayor me hago, más me doy cuenta de que es lo más difícil en esta vida devolver favores. Realmente no quiero deberle nada a nadie.
7. Los intercambios de favores obligarán a las personas a hacer cosas que no quieren hacer, así que no les debas nada que pueda solucionarse con dinero.
8. Estoy realmente confundido. Siento que soy demasiado pasivo, incompetente, no estoy dispuesto a tomar la iniciativa para encontrar trabajo y no quiero ser un desagradecido. Estoy realmente mal. ¡Necesito un cambio!
9. Cuando estás solo afuera, siempre quieres alguien en quien confiar. Me mudo mañana y lo que más quiero es alguien en quien confiar. Pero como no quiero deberle un favor a nadie, me aferro solo.
10. No quiero disculparme con nadie, no quiero deberle nada a nadie y no quiero lastimar a nadie. Cuando le devuelva el favor, estaré solo.
11. Mis requisitos no son altos. Sólo quiero no deber dinero ni favores. Puedo enfrentar a todos con calma. Prefiero deberme algo a mí que a otra persona. Una vida sin dinero carece de respeto por uno mismo y de dignidad.