El tratamiento de conducto puede ser reembolsado por la seguridad social.
Según las pólizas pertinentes, sólo algunos de ellos están cubiertos: empastes dentales (empastes), tratamiento de conducto, cirugía dental, extracción de dientes, irrigación local y medicamentos para pericoronitis, traumatismos óseos y de tejidos blandos orales y maxilofaciales. Son reembolsables la cirugía de desbridamiento y sutura, la cirugía de enfermedades de la mucosa oral y de la mandíbula, la cirugía de enfermedades de los nervios bucales y maxilofaciales, la cirugía de la articulación temporomandibular, etc. Sin embargo, no incluye el raspado (limpieza de dientes), la restauración bucal (instalación de prótesis), el tratamiento de ortodoncia y el blanqueamiento dental.