Cómo entender el sistema de tipo de cambio vinculado
Según el sistema de caja monetaria, los flujos y stocks de la base monetaria deben estar totalmente respaldados por reservas de divisas. En otras palabras, cualquier cambio en la base monetaria debe ser consistente con los cambios correspondientes en las reservas de divisas.
Los sistemas de tipos de cambio vinculados suelen estar asociados con la estabilidad. Hoy en día, muchos países en desarrollo adoptan sistemas de tipos de cambio vinculados para crear un entorno estable para la inversión extranjera. Bajo un sistema de tipo de cambio vinculado, un inversor siempre sabrá el valor de su inversión sin tener que preocuparse por las fluctuaciones diarias del tipo de cambio. Además, es más probable que un sistema de tipos de cambio vinculados ayude a reducir la inflación debido a una mayor confianza en la estabilidad monetaria.
A finales del siglo XIX, Gran Bretaña propuso y estableció un sistema de tipo de cambio vinculado para sus colonias. Como colonia británica, Hong Kong adoptó este sistema de tipo de cambio, que estaba vinculado a la libra. Fue abolido en 1972 y reabierto en 1983. Estaba vinculado al dólar estadounidense a 7,8 dólares de Hong Kong por dólar estadounidense.
Ejemplos típicos son el sistema de tipo de cambio vinculado del peso argentino al dólar estadounidense y el sistema de tipo de cambio vinculado del lev búlgaro al marco alemán (ahora euro).