Diario 200 palabras
Después del almuerzo, encendí el ordenador y me dispuse a navegar por Internet con mucho interés. Mi abuela lo vio y me instó a tomar una siesta. Me impacienté cuando escuché: "¡Duérmete, duérmete, sabrás dormir!" "¡Quiero que duermas, esto es por tu bien!" "La abuela también estaba un poco enojada. Pero no pude escuchar una palabra de lo que dijo, así que le respondí, causando un alboroto. Al final, no pude evitar llorar.
Después Al pensar detenidamente en lo que pasó, sentí que es una lástima que lo que dijo la abuela sea cierto. La falta de sueño no solo afectará tu salud, sino que también afectará tu estudio.