¿Cómo se llama el grifo de drenaje de la Ciudad Prohibida?
Muchas personas que han estado en la Ciudad Prohibida la han visto de forma intencionada o no. En las tres plataformas de los tres salones principales (Salón Taihe, Salón Zhonghe y Salón Baohe), hay hileras de cabezas de animales con forma de dragón talladas en mármol blanco.
La mayoría de los turistas piensan que estos grifos son sólo decorativos, pero en realidad se utilizan principalmente para el drenaje. Y su nombre oficial no es cabeza de dragón, sino cabeza de cigarra. Hay 1.142 cabezas cortadas en las bases de las tres salas principales de la Ciudad Prohibida. Siempre que hay una fuerte tormenta, el agua de lluvia caerá capa por capa. La salida de drenaje en la cabeza de la cigarra puede drenar toda el agua de lluvia sobre la mesa, formando un magnífico paisaje de "miles de dragones escupiendo agua". p>Chi es un antiguo mito chino. Un dragón legendario sin cuernos, también conocido como dragón Chi. Según la leyenda, su vientre puede contener mucha agua. En caso de inundación, puede absorber agua y drenar agua; en caso de incendio, puede rociar agua para extinguir el fuego.
El valor artístico de la decapitación
Como decoración en los días soleados, el grifo resalta la majestuosidad de la Ciudad Prohibida. También puede desempeñar un papel práctico en temporadas de fuertes lluvias, drenando el exceso. agua de lluvia y permitiéndoles fluir suavemente fuera de la Ciudad Prohibida. Imagínese, cada vez que cae una fuerte lluvia, el grifo de la Ciudad Prohibida escupirá miles de Bailian, acompañado por el sonido de la lluvia en sus oídos. Qué escena tan espectacular. Además de tan magnífico paisaje, la Ciudad Prohibida también cuenta con una exquisita red de tuberías de drenaje y zanjas y alcantarillas abiertas que se extienden en todas direcciones.
Aunque el sistema de drenaje de la Ciudad Prohibida ya no es tan flexible como lo era hace cientos de años debido al pulido de la historia, y algunos grifos ya no se pueden usar normalmente, hoy todavía puede hacer Sentimos una gran conmoción y nos maravillamos ante la sabiduría y la astucia de los antiguos.