Cuantas más acciones ordinarias posea un inversor, más control tendrá sobre la empresa, ¿verdad?
Cuando el número de acciones supera al de otros inversores (incluidas las personas que actúan de forma concertada), se convierte en un accionista importante y está cerca de poseer un control considerable.
Para lograr un control básico sobre la empresa, se requiere más del 50% de las acciones, y el ratio de votación es muy importante para las principales decisiones de la empresa.
Sin embargo, en vista de la débil situación de los inversores minoristas, las empresas que cotizan en bolsa con votación en línea estipulan que el apoyo de los inversores minoristas también es una parte integral de la toma de decisiones, por lo que no existe un control absoluto.
Para los inversores distintos de los accionistas principales, cuantas más acciones posean, mayor será su porcentaje de voto y mayor su poder para influir en los resultados de la votación. Pero para el control de la empresa, sólo cuando el porcentaje de participación del accionista mayoritario (incluidas sus personas que actúan en concierto) es inferior al 50%, otros inversores pueden alcanzar la participación máxima aumentando el porcentaje de participación o uniendo a sus propias personas que actúan en concierto. tiene una influencia significativa en la toma de decisiones de la sociedad, hasta tener un control absoluto parcial o equivalente.