Una maestra de jardín de infantes ha estado trabajando durante un año y quiere cambiarse a contabilidad.
De hecho, cada línea de trabajo tiene sus propias dificultades. Hay una gran diferencia entre estas dos profesiones. Ser profesor es relativamente fácil, mientras que ser contador es relativamente complicado. La responsabilidad de los contadores reside en el dinero y los datos. La responsabilidad del maestro recae en los niños. La forma de pensar también será diferente. El docente tiene una mentalidad relativamente abierta y el pensamiento contable debe basarse en reglas y regulaciones. La contabilidad requiere aprender muchos conocimientos teóricos. Depende de para qué tipo de trabajo sea más adecuada tu personalidad, para que seas más feliz en el trabajo.