¿Qué daño le harán las mujeres a sus partes privadas si hacen demasiado ejercicio? ¿Por qué?
Amar el ejercicio en sí es algo bueno, pero si las mujeres hacen ejercicio en exceso o durante mucho tiempo, fácilmente pueden causar lesiones en los genitales femeninos, como traumatismo vulvar, menstruación anormal, rotura de ovarios, endometriosis y ruptura uterina. Por ello, los médicos recuerdan a las mujeres que eviten el ejercicio excesivo durante el período menstrual.
Traumatismo vulvar: Si se tiene un descuido durante las actividades, como que la vulva choque con los cojines del asiento de la bicicleta, vigas u otros objetos duros, puede provocar fácilmente un hematoma vulvar y daños graves en la uretra, la vagina e incluso la pelvis. Las chicas jóvenes deben prestarle especial atención en este punto.
Anomalías menstruales: Según datos relevantes, las niñas que practican muchos deportes son propensas a sufrir anomalías menstruales, que se manifiestan principalmente como retraso de la menarquia, ciclos menstruales irregulares, amenorrea secundaria, etc. Cuanto mayor sea la cantidad de ejercicio, más tardía será la edad de la menarquia.
Rotura de ovario: El ejercicio intenso, levantar objetos pesados, apretar el abdomen o golpes fuertes, etc., puede provocar en la mujer rotura de ovario, dolor en la parte baja del abdomen, e incluso afectar a todo el abdomen.
Endometriosis: si haces ejercicio intenso durante la menstruación, la sangre menstrual puede fluir desde la cavidad uterina de regreso a la cavidad pélvica. Los fragmentos de endometrio que viajan con la sangre menstrual pueden implantarse en los ovarios y formar quistes. Puede hacer que las mujeres experimenten cólicos menstruales que empeoran progresivamente y provocar infertilidad.
Prolapso uterino: el ejercicio con sobrecarga, especialmente el levantamiento de objetos pesados, puede aumentar la presión abdominal y provocar un prolapso uterino temporal, pero no provocará prolapso uterino. Pero si esto se hace en exceso y durante mucho tiempo, puede producirse un prolapso uterino.
Además, si las mujeres hacen ejercicio en exceso, también pueden acelerar el envejecimiento, disminución de la inmunidad, fatiga mental, dolores en las articulaciones, palpitaciones del corazón, dificultad para respirar, etc. Por tanto, no conviene no hacer ejercicio, sino hacerlo de forma adecuada y moderada, y prestar atención al momento del ejercicio. Sólo cuando se hace bien puede resultar más beneficioso para la salud de las partes íntimas de la mujer.