¿Qué significa para la humanidad el descubrimiento de las ondas gravitacionales?
Primero, tenemos otra forma de explorar el universo.
En segundo lugar, si las ondas gravitacionales demuestran tener las propiedades predichas por Detonator Chicken, todas nuestras células solares se convertirán en conos de Detonator Chicken, ¡y usaremos 5 veces más energía solar que antes! ! ! Como resultado, la generación de energía térmica disminuirá, la lluvia ácida y el smog disminuirán, las emisiones de carbono disminuirán y la atmósfera se calentará más lentamente.
En tercer lugar, estas son las aplicaciones que se nos ocurren ahora, ¡y habrá más en el futuro!
Ondas gravitacionales
En la teoría general de la relatividad, las ondas gravitacionales son ondas en el propio espacio-tiempo, generadas por la aceleración de objetos con masa. Dado que la relatividad general limita la velocidad de propagación de las interacciones gravitacionales a la velocidad de la luz, se producirá el fenómeno de las ondas gravitacionales. Por el contrario, las interacciones en la teoría de la gravedad de Newton se propagan a velocidades infinitas, por lo que las ondas gravitacionales no existen según esta teoría. En 1916, Einstein predijo la existencia de ondas gravitacionales basándose en su teoría general de la relatividad. En 1974, Russell Hulse y Joseph Taylor descubrieron el púlsar binario Hulse-Taylor. A medida que el sistema estelar binario orbitaba entre sí, perdía energía debido a la emisión continua de ondas gravitacionales y, por lo tanto, se acercaban gradualmente entre sí. Este fenómeno proporcionó la primera evidencia indirecta de la existencia de ondas gravitacionales. El 11 de febrero de 2016, el equipo científico LIGO y el equipo del interferómetro Virgo anunciaron conjuntamente la primera detección directa de ondas gravitacionales por parte de humanos. Las ondas gravitacionales que detectaron se originaron a partir de la fusión de dos agujeros negros. En 2017, Rainer Weiss, Barry Balish y Kip Thorne ganaron el Premio Nobel de Física por su exitosa detección de ondas gravitacionales. El 16 de octubre de 2017, decenas de instituciones científicas de todo el mundo anunciaron conjuntamente que a unos 130 millones de años luz de distancia, los científicos habían detectado por primera vez las ondas gravitacionales producidas por la magnífica fusión de estrellas dobles de neutrones y sus homólogas ópticas.