Vivir es asumir responsabilidades.
Texto/Nueva perspectiva de crecimiento
Estar vivo como persona significa que hay que asumir la responsabilidad de vivir. Porque vienes a este mundo, llevando las expectativas de tus padres y una continuación de la búsqueda de una vida feliz por parte de ellos.
Ya seas soltero o casado. Tanto hombres como mujeres. Cada uno tiene sus propias responsabilidades. En primer lugar, debemos vivir una vida feliz, sana, feliz y gozosa.
Vivir es la mayor responsabilidad de una persona. Porque sólo viviendo puedes crear todas las cosas buenas, disfrutar de todas las cosas buenas, dar felicidad a los demás y hacerte feliz a ti mismo.
La gente debe vivir con naturalidad y ser un ser humano, de lo contrario será agraviada, insignificante, humillada y poco dispuesta. La gente debería vivir decentemente y vivir en el corazón de la gente. No pueden temer el poder, la riqueza o la adulación.
La gente debe vivir una vida maravillosa, vivir como un ser humano, ser bueno aprendiendo, ser diligente en el trabajo y ser dedicado. La gente debe vivir responsablemente, ser humana, amable, respetar a los mayores y amar a los jóvenes, ser patriótica y tener una mentalidad abierta.
Las personas que quieran vivir mejor y ser más felices que los demás estarán muy cansadas. Porque trabajas mucho más duro que los demás, incluso decenas de veces.
Quizás, mientras otros duermen, juegan y viajan, tú sigues trabajando, ganando dinero, aprendiendo y creciendo. También es posible que tus esfuerzos aún no hayan alcanzado tus objetivos o no hayan superado el punto de referencia en tu mente.
Las personas que no viven bien estarán más cansadas y miserables. Hagas lo que hagas cometerás errores, beber agua fría te obstruirá los dientes y perderás dinero aunque sueñes. Porque tu corazón siempre está lleno de un sinfín de quejas, odio, disgusto y arrepentimiento, y los más comunes son el odio y el arrepentimiento. Estas dos cosas siempre estarán contigo y serán las que desperdiciarán la mayor cantidad de espacio en tu mente.
La vida es sólo una copa de vino fuerte. Diferentes etapas tienen diferentes historias. Simplemente viértalo en la taza y huela con la nariz. Habrá una fragancia fuerte.
Tragar una copa grande de vino de un trago puede tener un sabor amargo o picante. Después de tragarlo, un calor imparable subirá a tu estómago, haciendo que sientas calor en todo tu cuerpo al instante. Puede resultar un poco incómodo después de un tiempo.
Como dice el refrán, el vino hay que saborearlo despacio y no beberlo con prisas. Bébelo poco a poco, sorbe lentamente, mantén el vino en la boca, deja que el aroma se extienda por la boca y saboréalo lentamente. La vida es como una taza de té. Cuando está caliente, el aroma es encantador, dulce en la boca y reconfortante en el corazón. Es suave cuando está frío y puede causar malestar estomacal.
Como dice el viejo refrán, haz tres tazas de un buen té y bébelo mientras esté caliente. Beber té es una actividad artística. No puedes simplemente bajar la cabeza para beber como una vaca vieja bebiendo agua y solo mirar hacia arriba cuando estés lleno. No podrás saborear el té en absoluto. Lo mismo ocurre con el ser humano. No se puede simplemente caminar con la cabeza gacha, hay que mirar al cielo y avanzar con valentía.
Las personas, al vivir y hacer las cosas, deben ser responsables, seguir el camino correcto, defender la justicia, no ser egoístas, no desagradecidos, cínicos, de mente abierta, sinceros y pragmáticos, modestos y progresistas.
Las personas, cuando están vivas, deben saber ser agradecidas, aprender a ser agradecidas, tolerantes y diligentes. Las personas con gran sabiduría crecerán mejor. Las personas que aman profundamente serán más felices.
¡La gente vive no por vivir, sino por vivir! Este es un pensamiento filosófico. ¡Cuando comprendas la esencia, definitivamente ganarás mucho!