Japón declaró oficialmente que Tokio y otros lugares han entrado en estado de emergencia por tercera vez. ¿Por qué no se puede controlar la epidemia en Japón?
La epidemia de COVID-19 es una catástrofe que hemos encontrado en esta guerra sin pólvora, hemos encontrado muchas dificultades y todos estamos haciendo todo lo posible para superarlas.
Recientemente, el primer ministro japonés, Yoshihide Suga, anunció que cuatro prefecturas, incluidas Tokio, la prefectura de Osaka, la prefectura de Kioto y la prefectura de Hyogo, han vuelto a entrar en estado de emergencia. Esta será la tercera vez que Tokio entre. un estado de emergencia. Japón marcó el comienzo de la cuarta ola de la epidemia del nuevo coronavirus. Durante varios días seguidos, el número de nuevos casos confirmados por día se ha mantenido entre cuatro mil y cinco mil, especialmente la proporción de pacientes infectados con virus mutantes ha seguido aumentando.
Durante este estado de emergencia, el gobierno japonés planea pedir a la gente que evite salidas innecesarias que no sean urgentes, y exige que los restaurantes cierren a las 8 de la tarde y no sirvan alcohol. Además, el gobierno japonés también exigirá el cierre de grandes instalaciones que superen los 1.000 metros cuadrados, como grandes almacenes, centros comerciales y cines, excepto las tiendas que venden artículos de primera necesidad.
La propagación de virus mutantes más contagiosos en Japón es preocupante. Ante tal batalla, esperamos que las personas puedan mantener interacciones sociales seguras y usar máscaras si es necesario para salir. El gobierno exige que la gente evite salir tanto como sea posible; las empresas y otras instituciones intentarán trabajar desde casa.
La propagación de la nueva variante del coronavirus es muy alarmante y es completamente diferente a la de virus anteriores. Necesitamos tomar la decisión correcta según la situación. Esta situación se repite una y otra vez, haciéndote sentir muy preocupado.
Necesitamos unirnos durante la epidemia. Trabajemos todos juntos. Gana esta batalla. Nadie puede relajarse ante la epidemia. Debemos insistir en la protección personal y mantener interacciones sociales seguras. Ante la epidemia, todos estamos haciendo lo mejor que podemos. Ganemos esta batalla. La epidemia es nuestro enemigo común. No te rindas. Siga conscientemente las diversas disposiciones para la prevención y el control de epidemias, comience desde usted mismo, comience desde cero y construya conjuntamente una línea de defensa estrecha para prevenir y controlar la epidemia.
Por último, me gustaría recordar a todos que presten atención a la protección personal. Presta atención a la higiene personal y potencia el ejercicio físico. Empieza por las pequeñas cosas que te rodean, sé responsable de ti mismo y de los demás.