¿A qué cuenta pertenece el efectivo disponible?
El efectivo disponible se refiere a la moneda almacenada en el departamento de contabilidad corporativa y administrada por el cajero. El efectivo disponible es el activo más líquido de una empresa. Las empresas deben cumplir estrictamente los sistemas nacionales de gestión de efectivo pertinentes, contabilizar correctamente los cobros y pagos en efectivo y supervisar la legalidad y racionalidad del uso del efectivo.
El efectivo en caja pertenece a la clase de activos y proporciona un indicador contable general, como activos fijos, materias primas, cuentas por cobrar, efectivo en caja, depósitos bancarios, otros fondos monetarios, etc. Las cuentas contables pueden calcular y supervisar de forma continua, sistemática y exhaustiva los aumentos y disminuciones de diversos elementos contables causados por las actividades económicas, y se dividen en cuentas de activos, cuentas de pasivos, cuentas **, cuentas de patrimonio neto, cuentas de costos y cuentas de pérdidas y ganancias. Existen tres normas principales para la clasificación contable, a saber:
1.
2. El nivel de detalle de la información contable.
3. La finalidad económica de las materias contables.
Contabilidad de clasificación detallada:
Realizar una contabilidad de clasificación detallada mediante la creación de un libro de cuentas de caja. El libro de caja es una cuenta secuencial que refleja y monitorea los saldos de caja. Es necesario utilizar un libro de cuentas personalizado y numerar cada página de la cuenta para evitar que las páginas de la cuenta se pierdan o reemplacen a voluntad y para facilitar su consulta. El libro de caja generalmente adopta un formato de tres columnas para recibo, pago y depósito, y el cajero los registra uno por uno con base en los comprobantes originales o recibos de efectivo y comprobantes de pago y comprobantes de pago revisados.
El negocio de retiro de efectivo del banco requiere generalmente de la elaboración de comprobantes de pago de depósitos bancarios y del registro en el libro de caja. Al final de cada día, los cobros y pagos totales en efectivo y el saldo del día deben calcularse y verificarse con el efectivo real para garantizar que las cuentas sean consistentes. No está permitido malversar fondos públicos y no está permitido compensar el inventario de efectivo con "pagarés".