La respuesta de China a la guerra en el norte de Myanmar
Después de que una bomba de un avión militar de Myanmar causara bajas chinas el 13 de marzo de 2015, el ejército chino adoptó una serie de medidas de alerta de control y prevención de fronteras.
El 16 de marzo de 2015, aparecieron en Internet fotografías de aviones de combate de la Fuerza Aérea China estacionados en aeropuertos avanzados y fuerzas de defensa aérea fortaleciendo los despliegues fronterizos. Se puede ver que los aviones de combate J-11 y J-7. han iniciado patrullas con bombas.
Además, los misiles tierra-aire y los radares de advertencia aérea "Bandera Roja-12" del Ejército Popular de Liberación también han sido enviados a Lincang, Yunnan, que limita con Myanmar. Este modo de alerta "combinado aire-tierra" utiliza aviones de combate de alto rendimiento para realizar patrullas de combate a lo largo de la línea para monitorear e interceptar aviones de Myanmar que puedan cruzar la frontera.
La Fuerza Aérea China ha desplegado radares de advertencia de largo alcance en la zona fronteriza entre China y Myanmar. Cuando los aviones de combate de la Fuerza Aérea de Myanmar despegan y ascienden a grandes altitudes, pueden ser detectados, identificados y rastreados por la Fuerza Aérea China. Radar chino de alerta de largo alcance. Para evitar que objetivos a baja altitud crucen la frontera, el Ejército Popular de Liberación también equipó la frontera con cañones de tiro rápido de 35 mm y doble cañón PG-99. El día 16, también aparecieron en Internet fotografías de aviones de combate de la Fuerza Aérea China estacionados en aeropuertos avanzados y fuerzas de defensa aérea fortaleciendo los despliegues fronterizos. A juzgar por estas fotografías, los aviones de combate J-11 y J-7 han comenzado a patrullar con bombas.