¿Cómo lidiar con cuentas por cobrar incobrables?
Cuando una empresa enfrenta cuentas por cobrar irrecuperables, el método de manejo depende de si se han hecho provisiones para deudas incobrables. Si se ha realizado una provisión, es necesario cancelar la provisión para insolvencias, lo que se hace debitando la cuenta "Gastos administrativos" y acreditando la cuenta "Cuentas por cobrar". Si no se ha realizado ninguna provisión, se debe cancelar directamente y también se deben ajustar las cuentas anteriores. Esta práctica surge de la intensificación de la competencia entre empresas y de la estrategia de ventas de ampliar las ventas mediante ventas a crédito, pero también puede generar una gran cantidad de deuda difícil de recuperar.
Las empresas se enfrentan a muchas incertidumbres en el cobro de cuentas por cobrar, como diferencias en el crédito de los clientes y en las capacidades operativas, lo que aumenta el riesgo de insolvencia. El propósito de hacer provisiones para deudas incobrables es dispersar los riesgos, hacer frente a las deudas incobrables de manera oportuna, equilibrar las pérdidas en cada período y ayudar al personal contable a realizar la gestión y el análisis de costos.
En contabilidad, existen dos métodos teóricos para tratar las provisiones por insolvencias: el método de cancelación directa y el método de provisión. El método de cancelación directa es simple y tosco y se incluye directamente en las pérdidas y ganancias. Sin embargo, ignora la relación entre las deudas incobrables y las ventas a crédito, lo que puede conducir a ganancias infladas y a una sobreestimación del valor de las cuentas por cobrar. El sistema contable de nuestro país prohíbe el uso de este método. Se recomienda adoptar el método de provisión para reflejar con mayor precisión el estado financiero de la empresa mediante la acumulación gradual de provisiones para insolvencias.